La lipolisis o lipólisis es el proceso metabólico mediante el cual los lípidos del organismo son transformados para producir ácidos grasos y glicerol para cubrir las necesidades energéticas. La lipolisis es el conjunto de reacciones bioquímicas inversas a la lipogénesis. A la lipolisis también se le llama movilización de las grasas o hidrólisis de triacilglicéridos.
La lipolisis es estimulada por diferentes hormonas catabólicas como el glucagón, la epinefrina, la norepinefrina, la hormona del crecimiento y el cortisol, a través de un sistema de transducción de señales. La insulina disminuye la lipolisis.
En el adipocito el glucagón activa a determinadas proteínas G, que a su vez activan a la adenilato ciclasa, al AMPc y éste a la lipasa sensitiva, enzima que hidroliza los triacilglicéridos. Los ácidos grasos son vertidos al torrente sanguíneo y dentro de las células se degradan a través de la betaoxidación en acetil-CoA que alimenta el ciclo de Krebs, y favorece la formación de cuerpos cetónicos.
Las hormonas tiroideas T3 (tri-iodotironina) y T4 (tiroxina) son sintetizadas en la glándula. Las acciones de T3 y T4 en la periferia incluyen el incremento de la tasa metabólica basal de la mayoría de las células del cuerpo, incrementando la lipólisis y el metabolismo de los carbohidratos, potenciando el efecto de las catecolaminas en el corazón y el sistema nervioso central e incrementado el metabolismo de las proteínas particularmente la degradación.
Es claro que un disbalance de las hormonas tiroideas tales como en el hiper o hipotiroidismo habrá un efecto drástico en el cuerpo.
El “ACEITE DE COCO ORGÂNICO VIRGEN” (Cocos nucifera) posee propiedades espectaculares para acelerar el metabolismo. Este maravilloso remedio natural actúa desde su misma estructura molecular. Posee triglicéridos de cadena media o MCT, que son mucho más cortos y solubles en el agua.
Expertos explican que los triglicéridos del aceite de coco se dirigen hacia el hígado, donde su presencia es quemada fácilmente, convirtiéndose en combustible para el cuerpo (es decir, la grasa propia del aceite es transformada en energía).
Previene la obstrucción en las arterias: la grasa presente en el aceite de coco minimiza el colesterol malo, ayudando a eliminar los bloqueos en las arterias previniendo enfermedades del corazón.
Las personas en países donde se consume mucho aceite de coco, como en las islas del Pacífico, la India y las Filipinas, tienen menores casos de enfermedades cardiacas y obesidad.
Además, acelera el metabolismo basal (energía necesaria para que los órganos vitales realicen sus funciones). Si se consume, el cuerpo entrará en un estado metabólico conocido como cetosis, donde se utiliza la grasa como combustible, en lugar de los azúcares, generando la pérdida de peso al quemar las grasas de reserva. Además, si se lleva una dieta baja en carbohidratos, el resultado será más rápido y visible.
(Fuente: https://laguiadelasvitaminas.com/aceite-de-coco-para-adelgazar/)
CRISáLIDAS DEL GUSANO DE SEDA
PALMITATO DE SODIO
OLEATO DE SODIO
LAURATO DE SODIO
GLICERINA
AGUA
DODECIBENCENOSULFONATO DE SODIO
MEA COCAMIDA
COCOAMIDOPROPIBETAINA
DIóXIDO DE TITANIO (CI 77891)
PENTAERITRITIL
TETRA-DI-T-BUTIL HIDROXIHIDROCINAMATO
PENTETATO DE PENTASODIO
ACEITE DE JUREMA (Mimosa hostillis)
ACEITE DE ARRAYáN
(Blepharocalyx tweediei (Hook. & Arn.) Berg 1856)
ACEITE DE LINAZA (Linum usitatissimum L.)
ACEITE DE ALMENDRA (Prunus dulcis)
HIDRóXIDO DE SODIO
ACEITE DE CACAHUANANCHE (Licania arborea Seem.)
ACEITE DE VERBENA (Verbena officinalis L.)
ACEITE DE ROMERO (Rosmarinus officinalis L.)
ACEITE DE ROBLE (Quercus robur L.)